The Cure Concert at Optimus Alive! 14 de julio 2012. “Toda persona puede conectarse con el mundo de ensueño de The Cure, donde la vida puede ser insana, melancólica, colérica, perdida, histérica y dichosa, todo al mismo tiempo (Robert Smith, 1992)

Como no solo de trail vive el hombre, el sábado 14 de julio de 2012 cambiamos el clásico entreno bandolero en la siempre socorrida sierra del Guadarrama por visita a la mágica Lisboa, para ver a Robert Smith y sus chicos de The Cure en concierto.
Aunque en nuestro ánimo sólo estaba ver y oír "lovesong-nes", "FridayI'minlove-s" "Lullaby-les" y "Inbetweendays-es", entre otras joyas del genio Robert....... en realidad el mismo sábado, en el Optimus Alive del paseo marítimo de Algés, tocaba bastante más gente; a saber: 

Palco Optimus
Morcheeba
Mumford & Sons
Noah & The Whale
We Trust
Palco Heineken
Blasted Mechanism
SebAstian (Live)
Katy B
Tricky
Awolnation
The Antlers
Here We Go Magic
Big Deal
Lisa Hannigan

Como nosotros (mi mujercita y uno mismo) musicalmente hablando sólo habíamos viajado para ver a The Cure y dado que su concierto comenzaba a las 12 de la noche, pues tuvimos todo el sábado para disfrutar de la ciudad de Lisboa, cosa que siempre es de agradecer, aunque como en nuestro caso fuera la 4ª visita a la capital lusa.

Bueno, todo el sábado es mucho decir......más apropiado sería indicar que fue la tarde sabatina; ya que para estar el mínimo tiempo posible sin el campeoncin, estuvimos con la criatura  el mismo sábado hasta las 12:00h del mediodía en Sanse, y luego de dejarlo al cuidado de Rocío (una prima de Itziar que es un encanto) salimos para el madrileño aeropuerto de Madrid-Barajas, donde a las 13:00h salía un avión de Vueling destino Lisboa, a donde llegaríamos 90' después.
Con algo de lío conseguimos el coche de alquiler cogido por internet, y es que a veces hay que desconfiar de las compañías baratas, porque como en nuestro caso, no tenía oficina física en la terminal del aeropuerto y nos tocó esperar unos 10 ó 12' hasta que llegó una persona que nos llevaba con una furgoneta a un polígono industrial próximo a recoger el coche.  Con el agravante, de que al poco de salir le sonó el móvil, y cuando terminó de hablar, nos dijo que tenía que volver al aeropuerto a por otro pasajero, que resultó ser una happy family,  creemos que holandesa.
Total, que entre ponte bien y estate quieto, pues se nos fue casi una horeja, con todos sus minutejos, quizás incluso alguno más.
Ya hechos los trámites, entre los que se incluyo un seguro a todo riesgo (que no estaba incluido en el precio de la reserva) de 7,5 euros, (porque de no pagarlo, nos cargaban 750,00 euros en la tarjeta y si teníamos cualquier golpecito, rayón, o le pasaba algo al vehículo, pues que volaban de nuestra cuenta) por fin salimos hacía Lisboa, en busca del Hotel, que estaba bien situado fuera del centro histórico, pero a unos 30' andando y con una parada de metro en la misma puerta, y con aparcamiento en la calle para el carro sin parquímetros.
Así, que de allí no se iba a mover hasta bien entrada la noche lisboeta cuando fuéramos al concierto de The Cure en Algés. (todo un acierto lo de llevar coche. Pues a pesar de haber trenes, autobuses y taxis para ir/volver de Lisboa al recinto del festival, cuando terminó el mismo, las colas para estos transportes eran descomunales)
Una vez acreditados en el hotel, subimos a dejar el equipaje, comer algo y más pronto que tarde a patear las 7 colinas del centro de Lisboa y todas las calles, callejuelas, callejones y escaleras que se nos pusiesen por delante en La Baixa, Chiado, Barrio Alto y La Alfama.

 

Después de toda la tarde pasea aquí, pasea allá, aunque fuera sin prisas y  pausadamente, llegaba la hora de acercarse al hotel para una reconfortante cena y una reparadora ducha para llegar al concierto en plena forma, aunque ya las patitas empezaban a estar pelín tiesas después de tanto tiempo de pié por el centro histórico de Lisboa.

 A eso de las 23:00h (11 de la noche) salimos dirección paseo marítimo de Algés, situado a unos 12kms de Lisboa, a donde llegamos en apenas 20'. Tardaríamos algo más en encontrar un sitio para aparcar el peugeot 207 en el que viajábamos tan cómodamente, hasta que lo incomodo fue localizar un sitio donde dejarlo. (qué pena que el concierto no fuera de esos como las pelis al aire libre de los auto cines)
Huelga decir que nos tuvimos que dar un buen paseo (+ de 3kms) desde la plaza de aparcamiento hasta el recinto del Optimus Festival, al que llegamos apenas 12' antes de la medianoche. Hora fijada para la aparición estelar de The Cure entre el clásico humo de hielo.

Localizamos el palco Optimus y lógicamente era del todo imposible ocupar una buena ubicación para ver a Robert y a los suyos; así que nos quedamos tan ricamente a unos módicos 190 metros de distancia. Desde donde, como no podría ser de otra manera, veíamos el escenario como si fuera la rampa de salida del trampolín de los saltos de esquí de Garmisch-Partenkirchen, sólo que a diferencia de los esquiadores que si saltan y se les ve bien durante el vuelo y mejor durante el aterrizaje, a los integrantes de la banda británica los íbamos a ver siempre igual de bien (ja,ja) o de mal, ya que no se iban a mover más que a derecha e izquierda sobre el escenario, pero nunca hacía adelante, o lo que es lo mismo, hacía nosotros.
Por suerte, había dos pantallas gigantes de video a ambos lados del palco, y cuando las cámaras enfocaban un primer plano de Robert, Simon o cualquier otro de sus compañeros, podíamos intuirles los caretos.
El sonido era realmente bueno y la voz de Robert Smith tan  mágica como siempre, así que quien no se consuela es porque no quiere.
Suena el tintineo de campanas de Plainsong y entre el humo de hielo aparecen puntualmente The Cure.
Tres horas de concierto con un sonido memorable y un repaso de casi todos sus clásicos.
Enlaces a videos de algunas canciones del concierto: (Videos de Heldergustavo)
Pictures of you
The hungry ghost
want
the end of the world
Just like heaven
In betweeen days
Lullaby

Lista de canciones the cure Optimus Alive

Impresionante el documento!!!!! aunque no nos pudimos quedar hasta el final, porque a partir de la 2ª hora de pie, y después de más de 6 de pateo por Lisboa, mi mujercita se estaba quedando en modo estatua de cera.

  El domingo aún tuvimos tiempo y ganas de volver a pasear por las calles del centro histórico de Lisboa antes de que llegará la hora del vuelo que nos devolvería a otra capital europea, quizás no tan mágica como la lisboeta, pero que a fin de cuentas es donde vivimos, y lo que es más importante, es donde nos esperaba el campeoncin.
Al próximo concierto de The Cure, sin duda se viene con nosotros.
Larga vida a Robert Smith...........y al trail running!!!!!!
www.thecure.com